¡Sois amadas y amados, estáis cuidadas y cuidados!

Ya sé que es momento de tempestades y por eso acudo a vosotros, para que sintáis lo mismo que yo siento y que no es otra cosa que puro Amor.

Comprendo bien la sensación que experimentáis en el cuerpo físico, pues yo también lo viví y lo experimenté y todavía lo recuerdo. Sin embargo, el hecho de sentir qué estáis pasando en estos momentos varía las frecuencias de vuestros átomos y de vuestras células y por ende de vuestras emociones, que experimentáis con altibajos sorprendentes pasando de una dimensión a otra.

Vengo porque deseo de todo corazón deciros que respiréis a través de vuestro corazón y que me respiréis a mí. Ya sé que la emoción os embriaga; atravesadla, sentidla, no la obviéis. Yo sé cómo pensáis y, dado que en vuestra mente ya existe la información, ahora tenéis la oportunidad de bajarla e integrarla en vuestro cuerpo físico, ya que es a través de vuestro cuerpo físico como atravesaréis el agujero de gusano en el que os halláis en estos momentos. Respirad hondo, sentidla profundamente y hacedla llegar con vuestra intención a todos vuestros átomos, pues la oportunidad es ahora.

Cuando uno solo de vosotros ilumina el resto de la Gran Verdad, que son todas las luces prendidas en todos los universos, una sola Luz ilumina. No sintáis que es poco, porque es algo inmenso.

Percibo el corazón agitado y la emoción profunda; sentirlo es hermoso y me hace recordar. Deseo que tengáis presente cada segundo de vuestra experiencia y, por favor, recordad que no estáis solos.

Atravesad esos momentos de emoción y de indecisión, de emociones encontradas que llegan repentinamente y os sacan de vuestro eje. Cuando sintáis que vuestro eje está desequilibrado, volved a equilibrarlo a través del recuerdo del Primer Halo, de la Primera Respiración. Esa es la manera con la que podréis anclaros. Tomad el Primer Halo, volved a respirar, porque esa Primera Respiración es la misma y, a su vez, es una nueva. Tomad el Primer Halo; ahí estamos todos, está el Creador y también estoy yo.

Yo Soy María, ya lo sabéis, y os abrazo con mucho amor; también os abrazo con felicidad, porque sé que todos y cada uno sin excepción estáis regresando a Casa; no lo olvidéis, todos sin excepción.

Recordad, cada vez que salgáis de vuestro eje, volved al primer Halo y, simplemente, imaginadme a mí, si así lo deseáis.

Estamos con todos vosotros y os abrazamos con amor puro e incondicional.

Muy amorosamente,

MARÍA

www.marinamares.com

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