«La verdad esta fraccionada en el mundo dual, y esparcida sobre el planeta Tierra. ¿Qué hay que hacer para volver a unirla?»
ESCUCHA…
LEE…
Pensamos que sabemos la verdad sobre muchas cosas, tenemos certezas que creemos inamovibles…Nos gusta mucho tener la razón… es muy importante para nosotros… Sin embargo, ¿nos hemos detenido a pensar porqué es tan importante? ¿Por qué preferimos romper una relación con otra persona o lastimar a alguien para demostrar que la razón está de nuestro lado? La respuesta es el ego… el ego se fortalece en nosotros cuando debilitamos a alguien, si tenemos la razón somos mejores, y eso hace que el ego crezca; si la otra persona está equivocada, es menos, está por debajo de nosotros, podemos mirarla por encima del hombro y fortalecernos gracias a su debilidad. Este mecanismo es inconsciente, el ego nos hace creer que discutimos en honor a la verdad …No hemos entendido nada…seguimos con nuestra mente dual de la tercera dimensión. Tenemos que ir acallando nuestro ego, para poder ser más espirituales, para poder salir del esquema dual de conciencia que hoy nos domina, saber que no es tan importante tener siempre la razón, que a veces es preferible no entrar en discusiones sin sentido…si de verdad estamos en lo cierto, la otra persona en algún momento lo podrá ver… ¿Y si no tenemos la razón? Aunque creamos haber abarcado todo, siempre existe la posibilidad de que haya algo que no estemos considerando, algo que se nos escape, un lado que no podamos ver. Pongamos un ejemplo, estamos viendo un cubo de color rojo, pero hay otra persona que dice que es de color verde, sin embargo, lo estoy viendo y sé que es de color rojo. ¿Qué podría estar sucediendo? Que ambos tengamos parte de la verdad, porque tres de sus caras son rojas y otras tres verdes, y según donde este parada la persona puede verlo de color rojo o verde, o incluso alguna persona ubicada en otro sitio podría verlo de ambos colores. Esto significa que según nuestra perspectiva vemos una parte de la verdad.
Pongamos otro ejemplo para captar mejor la idea, estamos viendo un cubo y decimos con absoluta convicción que es de color rojo, hay otra persona sin embargo que afirma que es de color azul…vuelvo a mirar el cubo y es rojo, recorro todas sus caras y es rojo, me he movido, he recorrido todo el cubo ya tengo todas las perspectivas posibles, la otra persona insiste en que es azul, que lo está viendo, que ha recorrido todas sus caras y es azul… ¿Cómo puede esto entenderse? Si yo actúo con mi mente dual, digo sin temor a equivocarme que la otra persona miente, que es un tonto, que quiere engañarme…yo sé que es rojo, no es que lo crea es que lo sé, me digo a mi mismo…
Es que estoy 100% seguro, y como tengo un pensamiento dual, creo, si yo tengo la verdad, la otra persona está equivocada…para mí no hay más opción, o el cubo es rojo o no lo es… ¿Qué ocurre? Lo que pasa es que no estamos considerando otra dimensión, yo puedo ver un cubo rojo por todas sus caras por fuera, y la otra persona estar viendo un cubo azul en todas sus caras por dentro y ambos tener razón…O parte de la razón ambos. Hay verdades que no podemos abarcar en esta dimensión, por lo tanto, si no pedimos la ayuda de seres de otra dimensión no vamos a poder llegar a la verdad absoluta, no vamos a entender.
La verdad esta fraccionada en el mundo dual, y esparcida sobre el planeta tierra. ¿Cómo hacer para volver a unirla?
Cuando mi ego está muy grande y considero que tengo un vasto conocimiento, y estoy 100% seguro de algo, que sucede?… dejo de escuchar al otro, hago como que escucho, y creo que poniendo mi oreja y silenciando por un rato mis palabras, estoy escuchando, cuando en realidad no lo hago. ¿Para qué escuchar, si tengo el 100% de seguridad de que estoy en lo correcto? Hago como que…y en ese mismo momento pienso cómo “hacerle entender”, cómo explicarle para que “se dé cuenta”, “para que entienda” …No escucho, me creo dueño de la verdad…
¿Cómo hacer para aprender a escuchar?, primero hay que eclipsar nuestro ego y nuestra soberbia. ¿Cómo? considerando que el otro puede tener razón, porque, aunque creamos haber abarcado todo, haber considerado todo, a veces, aun así, puede que no estemos viendo la totalidad, todos los puntos de vista. Podemos y es saludable tener convicciones, creencias, pero siempre deberíamos mantener en un 90% nuestra seguridad, y dejar un 10% para la duda, eso nos va a posibilitar escuchar, respetando al otro, e intentar aprender algo de él. Cada vez que escuchamos ampliamos nuestro campo de percepción. Escuchar es ponernos a disposición del otro dejando a un lado todo preconcepto. Escuchar es silenciar nuestro pensamiento, para tratar de entender su punto de vista, y considerar que puede tener parte de la verdad… Cuando escucho, me hago uno con el otro para completar un concepto, para ampliar la visión de ambos, cuando quiero imponer mi verdad, me separo del otro, lo hago mi oponente, funciono con mi mente dual, con el ego.
Cuando intercambiamos opiniones, no para tener razón, sino para entenderlo todo, para unir conocimientos y puntos de vista, y no para cerrarnos en nuestra idea y denostar al otro como si fuera un contrincante, ahí estamos contribuyendo a rearmar la verdad que está en este mundo 3D, fragmentada.
En la unidad nos encontramos como almas, como seres espirituales, comenzamos a vibrar en otra dimensión, nos elevamos, estamos más cerca de la Fuente, de Dios.
Cuando escucho, no juzgo, no antepongo mis creencias, mis mandatos, cuando escucho, pongo mi mente en blanco, me pongo en modo receptor, abierto a recibir, me vacío de contenido para dejar lugar a lo nuevo.
La verdad nunca ofende, no lastima. Cuando alguien en nombre de la verdad lanza una frase que hiere a alguien, no está diciendo una verdad, está emitiendo un juicio.
Si hubiera alguna verdad que, aun siendo autentica, lastima, hay que callarla. Solo sería honorable decirla, si aun lastimando, fuera mayor el beneficio que le produjera a la otra persona.
¿Dónde está escondida la verdad?
Está escondida en nuestro punto de vista, cada interpretación es nuestra verdad. Pero, ¿qué es el punto de vista de cada quién?
El punto de vista es desde donde miramos lo que miramos, desde donde analizamos, el lugar donde nacimos, la familia, la religión, el país, la escuela a la que asistimos, todas las experiencias de vida. Hay algo innato en nosotros, algo que traemos como bagaje, hay una esencia que nos pertenece y nos hace particulares, pero no es lo único que nos conforma. No es lo mismo nacer en un país que en otro, o en una familia determinada, cada elemento externo nos condiciona, nos genera un molde, que al mismo tiempo que nos contiene, nos moldea, y nos hace ser quienes somos, con nuestros puntos de vista, con nuestras verdades. Todo lo que nos conforma y moldea nos hace un ser único e irrepetible, por eso hay tantas miradas, hay tantos puntos de vista como personas, hay tantas verdades.
La verdad está en cada uno de nosotros, hay en cada uno un trozo de verdad, una parte de verdad. Por eso, cuando escuchamos a otro, estamos ampliando nuestro campo de percepción, tenemos una mirada más amplia, hemos incorporado más verdad, la nuestra y la de la persona que escuchamos. Hemos incorporado otro punto de vista, el propio y el de aquel, a quién hemos escuchado.
Cuando escucho, me vacío de contenido, dando lugar a lo nuevo, amplío mi campo de percepción, amplío la verdad que habita en mí. Y si poseo más verdad, me vuelvo más sabio.
La verdad es luz, y la sabiduría es integrar esa verdad en mí. La sabiduría es haberme experimentado en muchas situaciones para tener muchos puntos de vista, muchas verdades integradas en mí.
La verdad sobre una cosa, sobre un hecho, abarca la totalidad de matices y aspectos de esa cosa, o de ese hecho. Tiene que ver con la ley de polaridad, un hecho, una cosa, una verdad, trae su anverso y su reverso, y toda la gama de matices intermedios. Es como el trayecto de un péndulo.
Cuando nos mantenemos en eje, en nuestro centro, en consciencia divina, el péndulo se aquieta, y la verdad se hace una.
Muy amorosamente,
SAINT GERMAIN
Canalizado por Daniela Conrero
Haz una donación única
Haz una donación mensual
Haz una donación anual
Choose an amount
Or enter a custom amount
¡Mil gracias por tu generosa colaboración!
¡Mil gracias por tu generosa colaboración!
¡Mil gracias por tu generosa colaboración!
DonarDonar mensualmenteDonar anualmente