Amada gente de la Tierra, los saludo en nombre de Mi Raza-Raíz y sus Sub-Razas. Es poco lo que saben de Mí, de Mi servicio o de Mi gente. Por tanto, los invito a Mi presencia esta mañana. Tengan ahora la amabilidad de sentarse.

Un Manú es un ser que primordialmente ha asumido la gran oportunidad de moldear una gran cantidad de chispas espirituales en un Diseño Divino específico, para prestar un tremendo servicio cuando el tiempo lo requiera en el planeta donde el Manú ya sea que encarnará o enviará Sus emisarios.

¿QUÉ PASÓ EN ERAS ANTERIORES?

Ya que ustedes saben algo de los Manús que Me han precedido, y que son prisioneros de amor, también saben que Mi gran Séptima Raza-Raíz tiene que esperar la realización del Plan Divino y Patrón para cada uno de los miembros de las Razas Cuarta, Quinta y Sexta y sus Sub-Razas acompañantes, momento en el cual se Me permitirá poner de manifiesto la primera Sub-Raza de Mi Raza-Raíz. En eras anteriores, cuando el Señor Manú hacía este impulso inicial sobre el planeta Tierra, era necesario que el Manú en persona encarnara para mantener un anclaje de la perfección de diseño, personaje, actividad y servicio. Luego, la Sub-Raza, claro está la más fuerte de toda la Raza-Raíz, primero construiría el tramado fundamental —por así decirlo— para la actividad y servicio para esa Era.

En Nuestro servicio, primordialmente sobre el Séptimo Rayo, se les ha dicho que hemos completado Nuestro viaje a través de las Siete Esferas y que estamos a la espera (en la Séptima Esfera en la que se encuentran el Maestro Ascendido Saint Germain, los Templos de la Llama Violeta y todas las actividades del Fuego Violeta) de la oportunidad de ser llamados por el Tribunal Kármico y de que se nos permita enviar algunos de los hijos de Nuestra primera Sub-Raza. Si entran demasiado temprano antes de que las grandes cantidades de miembros de la Cuarta Raza-Raíz hayan regresado a casa, la Séptima Raza Raíz, que tiene una llave tonal y servicio que prestar totalmente distintos, no siempre podría realizar su misión con dignidad.

PROPÓSITO DE UN MANÚ

Podrían decir que, para la Raza-Raíz, un Manú representa su Dios-Padre. En Mi caso, no encarnaré ya que la Tierra, mediante la asistencia de los hijos del Maestro Ascendido Saint Germain y los tremendos Llamados pidiendo Llama Violeta, está siendo lo suficientemente purificada, particularmente de las entidades desencarnadas y la eliminación, al cierre del tiempo terrenal, de almas que de otra manera tendrían que reencarnar, y por la eliminación de los registros etéricos en los vivos y en los llamados “muertos”.

Cuando llegue la hora del logro y se abran las puertas del cielo, se pondrá de manifiesto la primera Sub-Raza representativa de la actividad del Rayo Violeta del Ceremonial, todos equipados con magníficas voces, todos capaces tanto de precipitar como de levitar desde que nacen, con el conocimiento de su ámbito celestial, sin velo intermedio.

Esta gran Raza deberá manifestarse, en su mayoría, en el Continente Suramericano, si bien hemos experimentado con éxito inculcando varios miembros de la primera Sub-Raza bajo Mi dominio en el Continente Norteamericano. Hemos escogido a Suramérica porque de un lado al otro de Brasil y por toda esa tierra que ahora es selva, la Tierra ha tenido tiempo para descansar. Pídannos a Mí y al Maestro Ascendido Saint Germain que purifiquemos ese tramo que cruza el Ecuador; y dennos una Tierra verde y bella para que la misma Lady Amarilis la adorne con belleza y limpie la efluvia humana.

UNA ACTIVIDAD DE LA LLAMA VIOLETA BAJO EL AMAZONAS

Dentro de la Tierra misma, como a cinco metros bajo la superficie, a lo largo y ancho de Perú (donde fluye el Amazonas) hasta Río de Janeiro, se ha establecido una actividad del Fuego Violeta. El resultado de esto (ya lo verán en sus periódicos) es que un gran número de reptiles venenosos y efluvia diversa están siendo vomitados al Amazonas y, por este medio, llevados al océano; y el Amazonas no volverá a ser ya más esa inundación de aguas lodosas sino que asumirá ese bello color azul zafiro que es el color de las aguas de nuestro Ámbito.

Nuestro Ámbito—donde se encuentra el Maestro Ascendido Saint Germain— es cómodo y feliz, y somos un grupo de individuos muy pacientes. Hemos esperado por mucho tiempo, pero ahora la Ley Cósmica nos ha asegurado que a la Primera Sub-Raza se le dará la oportunidad — algunos de ellos se presentarán ante la Madre María en el mes de Mayo, 1961— y estoy bastante seguro de que mil o dos mil de estos seres encarnarán primordialmente en el Continente Norteamericano, porque el Continente Suramericano todavía no está listo para ellos.

Esta gente, a medida que vaya creciendo hasta madurar, será muy distinta a la demás gente que jamás se haya visto sobre el planeta Tierra. Su cabello tendrá un color ámbar, y se parecerán mucho al Maestro Ascendido Saint Germain salvo que todos tendrán ojos azules y caras seráficas, figura esbelta, miembros largos y dedos elongados. Serán artísticos a rabiar. El teatro volverá al primer plano de nuevo, sólo que a través del teatro, el ballet y la música se les presentará a las masas la pompa de la vida como ésta debe vivirse. La mayor parte de ese tiempo que, en el pasado, se ha invertido en, digamos, el teatro y los diversos medios de entretenimiento para relajar la conciencia, ahora lo usarán ellos para llevar la atención de la gente sobre un punto focal. Ésta es su tarea y, por supuesto, será realizada de acuerdo con la tenacidad de las Chispas Divinas, las cuales encarnan con Mi bendición y, dicho está de más, con Mi omnipresente vigilancia y protección. Mis amados, estos seres ayudarán tremendamente al Maestro Ascendido Saint Germain en su Servicio y Actividad a la Vida.

ÁRBOL Y RAMAS

Como Manú, tengo una Raza-Raíz, y ésta tiene siete ramas. Es como un árbol con siete grandes ramas, sólo que éstas no florecen todas al mismo tiempo. Florecen una por una, comenzando de izquierda a derecha hasta que las Siete Sub-Razas hayan encontrado su expresión y su consumación. Entonces, el Manú y todas las Sub-Razas se juntan y ascienden, de la misma manera que descendieron antes, Quizás esto aclare algo que pueda haber quedado confuso en la conciencia de la mente.

En lo que a Mí concierne, me materializaré cuando sea conveniente. No asumiré la forma de un infante pero sí Me materializaré cuando el Reino del amado Maestro Ascendido Saint Germain se haya establecido plenamente sobre la Tierra; cuando la humanidad, los elementales y los Ángeles estén todos unidos en armonía. Será sólo entonces que podré introducir una gran cantidad de seres poderosos que he engendrado y a quienes amo y quienes, a su vez, realzarán la perfección de dicha Era Dorada.